Un departamento de diseño se enfrenta todos los días al
desarrollo de nuevos productos en un tiempo determinado, tarea que resulta
realmente complicada dado que el desarrollo de ideas no cuenta con un patrón como
otras actividades realizadas en una empresa. La creatividad es un recurso difícil
de manejar y controlar, pero que se puede direccionar y medir para así tener
una idea de su eficiencia y de qué manera promover la generación de nuevas
ideas y conceptos.
El tiempo, en sí mismo, no es un recurso. Lamentablemente no
puedes comprar tiempo. Sin embargo, a través de él corren todos los recursos a
toda velocidad.
Contratamos los servicios por horas, retribuimos a los
empleados mensualmente, pagamos los impuestos periódicamente, servimos los
pedidos en n días, etc. Cualquier actividad de la empresa que nos viniera a la
mente tendría una relación directa con el factor tiempo.
Podríamos llegar a decir que la correcta gestión del tiempo
determinará los beneficios de tu empresa. Desarrolla nuevos productos
rápidamente, prodúcelos más rápido aun y distribúyelos como un rayo y tu
negocio será un éxito.
Tiempos estimados: El experto conoce aproximadamente
los tiempos necesarios para realizar una tarea. Este sistema no es el más
recomendable ya que puede incluir muchas imprecisiones.
Tiempos históricos: Nos basamos en tiempos invertidos
en el pasado. Este es más peligroso que el anterior.
Muestreo estadístico: Este sistema es muy
recomendable en determinados casos. Por ejemplo, para tener una idea aproximada
de la utilización de la maquinaria, conocer la actividad media del taller, etc.
Debe aplicarse con rigor para obtener buenos resultados.
Cronometraje: Sistema de medición que combina un
aceptable grado de precisión. Es el más acertado cuando el método de trabajo no
está muy estabilizado.
Tiempos predeterminados: Existen numerosos sistemas,
siendo el M.T.M. y el MOST los de mayor difusión en nuestro entorno. Son
bastante precisos, siempre y cuando el método de trabajo esté bastante
estabilizado. Es conveniente filmar los procesos para facilitar el análisis.
Tiempos estándar: Son tablas de tiempos que
previamente se han obtenido mediante alguna de las técnicas anteriores.
Por último, solamente recordar que el tiempo es una
consecuencia de aplicar un determinado método. Por lo tanto, antes de medir
ningún proceso se debe definir, con la mayor precisión posible el método de
trabajo en cuestión.